Barcelona
Lucas Eguibar, última baza española en Sochi: «Claro que sueño con medalla»
El guipuzcoano Lucas Eguibar, campeón mundial júnior de boardercross y que ya ha subido dos veces a un podio de la Copa del Mundo de esa disciplina, es la última baza teórica que le queda al equipo español para evitar salir de los Juegos Olímpicos de invierno de Sochi (Rusia) sin medalla alguna.
Después de la decepción que supuso, el viernes, el cuarto puesto del doble campeón europeo Javier Fernández en la prueba individual de patinaje artístico -en la que iba tercero tras el programa corto-, durante la mañana de hoy, sábado, se produjo el segundo abandono, esta vez en el supergigante de esquí alpino, de la andaluza Carolina Ruiz.
La esquiadora de Sierra Nevada, única española que ha ganado un descenso de Copa del Mundo -el de Meribel (Francia), del año pasado-, apuntaba alto en Sochi, pero hoy corrió igual suerte que en la prueba reina del miércoles; se salió de recorrido. Por lo que también saldrá triste de Rusia, consciente de que, a sus 32 años, éstos fueron sus "últimos Juegos": los cuartos, desde que debutara, hace doce, en los de Salt Lake City'02 (EEUU).
Por lo tanto, España debe agarrarse como un clavo ardiente al equipo que dirige el barcelonés Israel Planas, en el que destaca el donostiarra Eguíbar y que integran también el cántabro Laro Herrero y el ceutí de la federación andaluza Regino Hernández.
Un equipo que es una auténtica piña y que tendrá que intentar rizar el rizo el próximo lunes en la prueba que se disputará en el Extreme Park de Rosa Khutor.
Donde probaron pista hoy, por primera vez, con muy pocas horas de sueño, tras haber llegado a Sochi durante la noche del viernes, después de un peculiar viaje.
"Yo salí hace tres días. El 12 fui a Barcelona. El 13 dormimos todos en Zúrich (Suiza) y ayer salimos a las siete de la mañana y llegamos aquí a las doce de la noche", comentó a Efe "Luki", campeón mundial júnior (en Erzurum, Turquía), con un tercero en la Copa del Mundo de Arosa (Suiza) del año pasado y un segundo en la de Vallnord-Arcalís (Andorra), en enero de éste.
"Yo creo que estoy bien. De las últimas carreras, algunas me han ido bien y otras regular. Ahora mismo estoy algo cansado, porque no pudimos dormir mucho, ya que la única posibilidad de ver la pista de competición era hoy por la mañana. Quizá hubiese sido mejor haber venido algún día antes, pero esto es lo que hay", afirmó el 'rider' donostiarra tras tomar contacto con el Extreme Park de Rosa Khutor.
"Antes de venir hicimos buenos entrenamientos en Vallnord. Estuvimos en todos los sitios, En Pal, en Arinsal, en Ordino... Salvo un día que nevó mucho, aprovechamos bien el tiempo", dijo.
"Pero aquí, de momento, no hemos podido hacer mucho. Apenas pudimos entrenar algo hoy en la pista de la prueba, en la que mañana compiten las chicas", añadió.
"El circuito es parecido al del año pasado (el de la Copa del Mundo), aunque con algunas modificaciones. Hay un par de saltos que son más grandes", comentó Eguibar, que durante el entrenamiento de hoy se lastimó el talón derecho. "Ahora me mirarán los médicos. Me duele, pero espero que no sea nada", añadió.
A pesar de los contratiempos, Luki, que en Sochi debuta en unos Juegos, está ilusionado. "Claro que me hace ilusión, tenía muchas ganas de estar aquí. La de los Juegos es una carrera más, pero sólo la hay cada cuatro años. Estoy contento, porque soy joven. No tengo nada que perder y mucho que ganar", indicó el 'rider' vasco.
"Claro que he soñado con la medalla", confesó. "Pero creo que con ella sueña todo el mundo, ¿no?", apuntó Eguibar, que no tuvo ni tiempo de fijarse en cómo se encuentran sus principales rivales para la prueba del lunes.
"Hoy teníamos sólo hora y media para hacer bajadas, así que ni me fijé en cómo están los demás. Pero entre los favoritos estarán los italianos, un australiano (Alex Pullin, campeón del mundo en La Molina, hace tres años; y en Stoneham, Canadá, el pasado), los austriacos... Hay mucha gente aquí", afirmó el guipuzcoano.