El debate sobre si la final de la Copa del Rey se jugará en el Bernabéu va a tener un recorrido muy corto este año. Cada vez que los azulgrana se clasifican para el partido decisivo y no lo hace el Real Madrid surge la cuestión desde Barcelona.

El debate sobre si la final de la Copa del Rey se jugará en el Bernabéu va a tener un recorrido muy corto este año. Cada vez que los azulgrana se clasifican para el partido decisivo y no lo hace el Real Madrid surge la cuestión desde Barcelona. Otras veces ha habido espacio para la incertidumbre, pero este curso está todo muy claro desde el principio. Es el club propietario el que debe primero proponer su estadio como sede, algo que la entidad blanca no va a hacer en ningún momento. «En el Bernabéu no se puede jugar la final de Copa porque hay obras. Nosotros tenemos que cumplir con la licencia», dijo Florentino Pérez ayer en la presentación del libro en el que el periodista Enrique Ortego narra la consecución de la Undécima, la Supercopa de Europa y el Mundial de Clubes la temporada pasada.

Con una única frase, el presidente del Real Madrid acabó con cualquier tipo de especulación y con el sueño de los azulgrana de dar la vuelta de honor en el campo del máximo enemigo.

Como sucede cada vez que quedan definidos los finalistas, comienza la búsqueda del mejor escenario posible. Se trata de que pueda acudir el mayor número de espectadores y de que sea un desplazamiento igual de cómodo para los dos equipos. El Vicente Calderón es la sede que cuenta con mayor número de opciones para acoger el partido el próximo 27 de mayo. El Atlético, como es reglamentario, pidió hace tiempo acoger el último encuentro de la temporada. Para la directiva rojiblanca no habría mejor despedida al estadio del Manzanares que ser el escenario de la final. Los de Simeone ya no van a poder estar, pero no parece que el nombre de los finalistas pueda llevar al Atlético a arrepentirse de haber ofrecido su casa.

Por capacidad, el Calderón es perfecto, como también lo sería el Camp Nou, una opción que seguramente descartará el Alavés. A los vitorianos les gustaría poder disputar una cita tan histórica en el Nuevo San Mamés, que también cumple con todos los requisitos. El problema es un concierto del grupo Guns N’ Roses previsto para una fecha cercana, que borra de un plumazo esta alternativa. Mestalla siempre aparece en las quinielas y cierra la lista de opciones reales y disponibles.

El Bernabéu no lo es porque las obras de remodelación aprobadas no hace mucho por el Ayuntamiento comenzarán nada más concluir la Liga, algo que ya estaba previsto antes de que se definiesen los finalistas. Si no hay sorpresas, la fiesta del fútbol español será junto al Manzanares.

«La Undécima. Supercopa y Mundial de Clubes»

A la presentación del libro, escrito por Enrique Ortego, acudieron el presidente del Real Madrid, Florentino Pérez; José Creuheras, presidente del Grupo Planeta y de Atresmedia, y Paco Gento, presidente de honor del Madrid. Al acto acudieron también los jugadores Keylor Navas, Lucas Vázquez, Ramos, Marcelo y Nacho