Juan de Castilla: «Lo que para muchas personas puede ser la guerra, para mí es un jardín»
A pesar de que el toreo en Colombia vive horas complicadas, el antioqueño se proyecta como su torero más internacional
Juan Pablo Correa Sánchez es, aparentemente, un hombre normal. Un inmigrante colombiano buen conversador, con una energía inagotable, una bondad que se le sale por los poros y la sonrisa fácil. Madruga a trabajar y las pasa canutas para llegar a fin de mes como cualquier cristiano. Pero su historia y el sueño que lo mueve lo convierten en un ser excepcional. Salió de los barrios más humildes y castigados por la violencia de la Medellín de los años 90, y encontró en el toreo su motivación para salir adelante con su familia. El propio Fernando Botero, el más internacional de los artistas colombianos, le ayudó a venir a España para formarse y recorrer el camino abierto por el gran César Rincón. Ahora, él es la gran esperanza de la afición colombiana y, sin duda, el torero cafetero con mayor proyección internacional de la actualidad. Hablamos con él de la que puede ser la temporada de su explosión definitiva en Europa.
Juan, en Colombia ya es reconocido y respetado, pero lleva varios años en España y apenas se empieza a escuchar su nombre.
No es fácil para ningún torero ganarse el reconocimiento del aficionado y, mucho más, trascender el mundo taurino y que la gente de la calle te conozca. Aunque llevo toda la vida queriendo ser torero y trabajando para conseguir mi sueño, apenas ahora se empieza a ver la punta del iceberg. Es cierto que en Colombia ya voy teniendo un nombre, los aficionados me han visto triunfar y me han mostrado su cariño y su respeto. Pero aquí en Europa me ha costado mucho encontrar un hueco y ahora que estoy consiguiendo meter la cabeza, no voy a dejar pasar la oportunidad para meterme de lleno.
¿Pesa ser extranjero?
Sí, pesa, claro que pesa y lo entiendo. Sobre todo pesa muchísimo en los pueblos, porque hay toreros locales y nacionales que son más queridos en la región o que pueden arrastrar aficionados de pueblos cercanos. Es un hándicap, pero está bien, no pasa nada. Eso quiere decir que cada vez que me ponga un traje de luces en España va a tener mucho más mérito y tengo que tener un punto mayor de compromiso para dar razones y que vuelvan a contar conmigo.
A César Rincón le costó 10 años entrar de lleno en Europa.
El camino del maestro fue tan bonito como difícil. Es admirable. Él también tuvo el reconocimiento en Colombia mucho antes de que aquí le vieran en su real dimensión. No estaría mal que mi camino, obviamente con mis circunstancias, pudiera seguir su huella y convertirme en una figura de su nivel. Sería un sueño, pero estoy escribiendo mi propia historia.
Viene de triunfar en su tierra, pero ya en Madrid se vio algo de lo que es capaz el año pasado.
Sí, años antes en Bogotá, y ahora en Cali y Manizales he podido mostrar mi toreo con mayor rotundidad. Lo relevante es que ha sido en plazas importantes y delante de las figuras, por lo que quizás los triunfos han tenido más repercusión. Sin embargo, es el toreo que entreno a diario y el mismo que sale en los pueblos con carteles más modestos. Siempre salgo a darlo todo. Igual que en Las Ventas el año pasado y aunque el triunfo de verdad no llegó, sí que salí satisfecho porque no me dejé nada y el público me demostró su respeto. Ojalá que este año pueda sacar todo lo que no ha visto la gente aun de mí.
Será el primer torero colombiano en lidiar una corrida de toros de Miura en Las Ventas.
(Resopla) Así es, pero es que ese día será muy especial. En la mañana estaré en Vic-Fezensac, Francia, en una corrida concurso de ganaderías que ya tenía firmada antes que saliera lo de Madrid. Así que será un esfuerzo que estaré orgulloso de hacer. Ellos contaron conmigo y, aunque me dieron la opción de declinar el contrato, no quise defraudar su confianza y es una oportunidad que valoro muchísimo. Luego saldré volando, literalmente, para llegar a cumplir mi compromiso en Madrid esa misma tarde. Era tomarlo o dejarlo y Madrid merece cualquier esfuerzo y sacrificio, así que ahí estaremos, con la corrida de Miura, o la que nos pongan por delante. Ahora mismo, esta es mi puerta de entrada a las ferias y pienso entrar.
¿Cómo se vive teniendo que madrugar a trabajar y sabiendo que tiene un reto así por delante?
Supongo que igual al que tiene una hipoteca que pagar y una presentación laboral decisiva los días siguientes: día a día, paso a paso. Creo que lo importante y la diferencia está en tener la fortaleza mental y la disciplina para perseguir lo que uno quiere con decisión. Es la única manera de canalizar todas tus energías para lograr el objetivo. No es fácil, hay momentos y circunstancias que te pueden hacer dudar, pero cuando tu sueño y la razón de tu vida está involucrada, se hace sencillo. Por las circunstancias de mi vida, me siento cómodo en situaciones complicadas, lo que para muchos puede ser una guerra, para mí es un jardín.