Crítica de "Vaiana 2": animación pasada por agua ★★★
Directores: David G. Derrick Jr., Jason Hand, Dana Ledoux Miller. Guion: Jared Bush, D. L. Miller. Música: Opetaia Foa’i, Mark Mancina, Abigail Barlow. EE.UU, 2024. Duración: 99 minutos. Animación.
Creada:
Última actualización:
En 2016 tuvo una buena acogida por parte de público, Prensa y Academia de Hollywood, que la nominó a dos Oscar, mejor largometraje animado y canción, aunque al final no obtuvo ninguno. De ahí que nos extrañe un tanto los años transcurrido desde entonces hasta la aparición de esta segunda entrega de «Vaiana», filme musical de animación pasado de nuevo por mucha agua cuya historia se desarrolla hace dos milenios en unas islas del sur del Pacífico y que, francamente, poco bueno y nuevo aporta a la anterior.
La protagonista es la propia Vaiana Waialiki, una joven que desea explorar el mundo navegando por el océano y que ahora regresa con las mismas ganas para, tras recibir una inesperada llamada de sus antepasados, embarcarse en una nueva aventura con la idea de reunir a todos los habitantes de las distintas tierras que ocuparon aquella zona y que fueron segregados por un ente maligno.
De manera que la adolescente princesa, junto con el vanidoso semidiós Maui (cuánto me recuerda siempre al cantante hawaiano ya fallecido Israel Kamakawiwo’ole, quien interpretaba aquel hermoso tema titulado «Somewhere Over The Rainbow») protagonizan esta nueva cinta junto a una tripulación de lo más variopinta que incluye a unos inefables cerdito y ese pollo histérico de ojos saltones.
La aparición de una bruja «buena» que intenta que Vaiana entienda de una vez que «las reglas están para romperlas» y de unos seres gigantescos de lo más graciosos y coloridos, amén de unos «cocos» que solamente desean lo mismo que esta intrépida muchacha, es decir, recuperar a su pueblo y sus raíces, completan el reparto.
La fórmula Disney de los últimos tiempos sigue, mal que bien, adelante: a unas técnicas visuales portentosas añadan que la heroína es una mujer muy echada para adelante y que no se casa (literalmente, aquí no hay ni habrá, parece, pareja o «amorío» tonto para la chica por ningún lado) con nadie y un más que posible «continuará» en el aire. O, mejor dicho, entre mares.
Lo mejor:
Hablamos de Disney, o sea, que la animación es notable, y todas las escenas en el mar, una pasada
Lo peor:
Lo poco que aporta de nuevo y bueno a la anterior sin ser aquella tampoco para tirar cohetes