¿Dónde se ubica el pinar más grande de Europa?

España siempre ha sido una tierra de grandes arboledas. Actualmente son muchos los espacios naturales que albergan estas superficies y que han ido creciendo con el paso de los años. Si antes de que finalizara el pasado siglo la superficie arbolada en tierra nacional ocupaba el 28 por ciento del total, los últimos datos hablan de un 37 por ciento. Más de 26 millones de hectáreas con 7.500 millones de árboles aproximadamente y que ha convertido a España en la segunda nación en este ámbito, solo por detrás de Europa.

Encinares, dehesas, pinares, bosques mixtos de frondosas y coníferas conforman un amplio abanico de lugares idílicos para conocer, caminar y descansar. Pero sabe en qué lugar se encuentra el pinar más grande de Europa. Pues nos acercamos hasta el noroeste de la provincia de Soria. Allí entre el Parque Natural de la Laguna Negra y los Circos Glaciares de Urbión nos adentramos en la Comarca de Pinares, en Covaleda, donde cientos y cientos de pinos silvestres conforman este espacio único.

Más de 105 kilómetros cuadrados donde el pino silvestre muestra su poderío sobre otro tipo de árboles como hayas, robles, arándanos, brezo, margarita alpina o helechos, todos ellos incluidos en la Red Natura 2000. Nos topamos con una pequeña localidad, con apenas 1.500 habitantes y sobre 1.214 sobre la altura del mar.

Los orígenes de Covaleda hay que buscarlos en la Edad de Bronce. Allí habitaron tribus celtíberas de pelendores y duracos que pelearon contra los conquistadores romanos, que acabaron imponiéndose. De dicha civilización permanecen aún hoy los restos de la calzada y el puente de Santo Domingo. Junto a la iglesia aunque se pueden ver tumbas antropomorfas de la Edad Media.

Entre su monumentos y lugares de interés destacan la Iglesia de San Quirico y Santa Julita, de estilo gótico-tardía, la ermita de la Virgen del Campo, construida entre los siglos XVII y XVIII o las “Sierras de Agua”, rústicas obras hidráulicas convertidas en aserraderos de madera utilizando directamente la fuerza del agua y los arroyos, actualmente en desuso.

Pero si queremos adentrarnos por este bello y único paraje medioambiental, qué es lo que no debemos perdernos, pues para empezar, el Pico de Urbión, con una gran cantidad de rutas para acceder hasta él y ya arriba disfrutar de unas espectaculares vistas.

Sin duda alguna, uno no puede dejar de admirar las lagunas de origen glaciar existentes en la zona, como la Larga, la más grande de todas; la laguna Helada o la laguna de Hornillo, oculta por la alta morrena que la rodea. Pero también cuenta con siete fuentes en sus alrededores como son las de la Arenilla, de Bocalprao, Cagalera, Canal, Cubo, Paso de los Arrieros y el Pozo de San Millán.

Pero si hay una senda que no debemos perdernos es la de las Cascadas de Covaleda, dos horas de senda para todas las familias para poder disfrutar de paisajes boscosos y una sucesión de pequeñas cascadas de gran belleza, la del Río la Ojeda, la Chorrera y el Paso del Peñoncito.

Pero también cerca de la Covaleda hay otras dos, la del Arroyo Lechoso y la de la Mina del Médico, y también varias localidades con un rico patrimonio cultural como son Duruelo de la Sierra, donde destaca su necrópolis medieval o Vinuesa, que nos abre el camino hacia la Laguna Negra, otro lago de origen glaciar y que cuenta en sus alrededores con uno de los miradores más impresionantes de la Comarca de Pinares como el es el mirador de Cueva Mujeres.. Y si aún tenemos fuerzas y ganas pues acercarnos hasta Calatañazor y la Fuentona de Muriel.

Finalizamos nuestro recorrido por esta tierra de pinares a la mesa de un buen restaurante para degustar el plato típico de la zona, como es la caldereta de cordero o ajo arriero, pero sin olvidar las cecinas de jabalí, corzo y venado. Un auténtico manjar.