Desapariciones en Aragón: hallan uno sin vida mientras siete menores siguen sin aparecer

20 desaparecidos. Este es el preocupante número de desaparecidos en la comunidad autónoma que, en la actualidad, aparecen registrados en las bases de datos del Centro Nacional de Desaparecidos (CNDS). Entre ellos, cinco niñas con edades que no han transcendido hasta el momento, un adolescente de 15 años y otro de 17. Los más vulnerables de todos, junto a las personas de la tercera edad, son.

Detrás, 20 familias y amigos rotos de dolor por la frustración y desolación a razón de las desapariciones de sus seres queridos, que normalmente suelen ser involuntarias. Este miércoles una de ellas ha recibido la peor de las noticias: Luis Miguel Alejandro L. E., el jubilado de 73 años que dejó de responder las llamadas de su hija el pasado 23 de febrero, ha sido desgraciadamente encontrado sin vida en el hueco del ascensor del edificio de vecinos donde residía en Zaragoza.

En el hueco del ascensor

El fallecido en extrañas circunstancias -por el momento las autoridades policiales descartan el asesinato a la espera de la autopsia- ha sido, casualmente, la última desaparición denunciada en la capital aragonesa. Luis Miguel era uno de los tres fallecidos que, en apenas una semana, se esfumaron sin previo aviso generando el desasosiego y desesperación entres sus círculos más próximos.

Mejor suerte, sin embargo, ha corrido la familia de Antonio D.C., de 65 años, quien este mismo lunes salió de su casa de Zaragoza sin dejar el menor de los rastros pero que en solo 24 horas fue encontrado con vida, según informan en el portal digital ‘SOS Desaparecidos’. Dado el caso, ¿cómo deben actuar los familiares que, desafortunadamente, vivan esta traumática situación para que la búsqueda sea fructífera y todo termine en el mejor de los finales como el de este jubilado?

El gran error de las primeras 24 horas

Desde CNDES -el Centro Nacional de Desaparecidos- dan algunas respuestas clave ante la desaparición de seres queridos. Pero, principalmente, echan por tierra una de las ideas más erróneas que han calado desde hace años en la sociedad española. Y es que no hace falta esperar las 24 primeras horas desde que se tenga constancia de la desaparición de la persona en cuestión para acudir inmediatamente a cualquier comisaría de la Policía Nacional o cuartel de la Guardia Civil y denunciar el desafortunado suceso.

Antes, los profesionales de esta entidad depende del Ministerio del Interior y que actúa de forma coordinada con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, recomiendan a los familiares buscar al desaparecido en su vivienda o aquel lugar donde se sabe que estuvo la última vez que se le vio. Filtro muy importante sobre todo en el supuesto de personas ancianas y adolescentes: muchos son los casos en los que los primeros han sufrido una caída en su propio domicilio que las ha inmovilizado y, los segundos, han decidido esconderse por diversos motivos.